DOS GEMELOS SEPARADOS AL NACER:
Interpretación
de su desigual destino a la luz de la astrología clásica.
Por ADELA FERRER
Primera entrega: La madre y sus circunstancias.
Escenario: Hospital Provincial de Valencia, sala de partos, se oye de fondo
el ruido de la lluvia sobre las losas del patio y de vez en cuando, un trueno;
es lógico, estamos a 13 de noviembre de 1958 y en Escorpio es fijo que
estamos en otoño.
(José Luis Pascual era por entonces una tierna criatura en la edad de la
crianza, pero de haber crecido, nos hubiera predicho tiempo húmedo ya que Venus
en conjunción al Sol es significadora de lluvias porque su estado en relación
al Sol es semejante al estado de la mujer con respecto al varón, que cuando
yace con ella, echa su humedad. También podría haber aventurado tormenta
con aparato eléctrico, porque Marte, acercándose a la tierra y a sus hálitos
se humedece y si es significador de lluvias causa relámpagos, truenos, rayos y
maravillas celestiales en el aire)
En fin, que Antonia García está a punto de dar a luz el fruto de su
“vientre pecador”, y digo esto porque Antonia es una mujer soltera que desde
hace tres años (cuando Júpiter atravesó su Casa V e hizo conjunción con su
Neptuno natal) mantiene relaciones íntimas con un chico de esta ciudad a la que
la trajo la emigración y el cual se niega a pasar por la vicaría. (Sol y Venus
en Casa IX). Ahora, ya no piensa nada más que en que se le haga corta la hora,
porque le ha llegado el momento de ser madre: "Y ten en cuenta esto:
Cuando llegue Júpiter al lugar en el que se halla Marte en el radical, o cuando
realiza aspectos a este lugar por oposición, cuadratura o trígono, juzga que
aquellos serán los tiempos de preñez de hijos"
Pero durante toda la tarde ha estado oyendo, además de la lluvia, sermonear
a su santa madre, una pobre viuda muy trabajada por la vida a quien angustia la
idea de que su hija no sólo va a ser una madre soltera escarnecida por la
hipócrita moralina social, sino que a ello se une la escasez de recursos
económicos y, para mayor inri, que lo que viene en camino no es un hijo ¡son
dos! De modo que Gregoria, la madre de Antonia, ya ha hablado con las monjitas
explicándoles la situación para que vayan preparando los trámites de una
posible adopción que es, a juicio de todos, la mejor de las soluciones. Y es
que hay madres, como doña Gregoria, que tienen un poder: (en la carta de
Antonia Luna-Marte en conjunción en Tauro).
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A las 2 de la madrugada nace el primero de los niños: Jose Antonio, con la
Luna a 14º 52´ de Sagitario, (en la Casa VIII de Antonia). Media hora después
nace Juan, cuando la Luna ha avanzado casi un grado más 15º 11´ y se ha
colocado ya en la Casa IX de su reciente y atribulada mamá.
Aunque Antonia no acaba de ver claro lo de dejar a sus hijos y entre ruegos
y empecinamiento (en esos momentos tiene a Saturno en tránsito de conjunción
con el Sol) consigue algo: Renuncia al primer niño y lo entrega
directamente en adopción, pero reconoce y se reserva la patria potestad del
segundo, aunque deberá dejarlo en la Casa Cuna porque Gregoria se niega
rotundamente a llevárselo a su casa.
Tres años más tarde y coincidiendo con la conjunción de Júpiter Saturno en
su Casa X Antonia conseguirá casarse con el padre de los niños, recogerán a
Juan de la Casa Cuna y comerán alguna que otra perdiz.
Si nos fijamos en la carta natal de Antonia observaremos que el regente de
la Casa V, cuya cúspide está en Cáncer en término de Saturno, es la Luna, la
cual en el signo de Tauro está separándose de la conjunción con Marte: "Si
el regente de la Casa V hace aspecto separativo del regente del Ascendente sus
hijos nacerán muertos o morirán".
"Si se encuentra una infortuna en ángulo haciendo aspecto a la Luna significa
que aquel nativo echará siempre a sus hijos de casa, mientras viva".
En la Casa V está presente Neptuno (el embarazo rodeado de secreto) en
cuadratura con Saturno-Mercurio (la negación inicial del padre de los niños, la
hostilidad de la abuela y de la sociedad), opuesto a Júpiter -aquí, Júpiter,
pese a estar en domicilio de Saturno, está en su gozo-, pero parece que Júpiter
y Neptuno son enemigos naturales, de modo que lo que generosamente regala
Júpiter, dos hijos de una vez, es ocultado por el sigiloso Neptuno; Al mismo
tiempo, Neptuno está en trígono al Sol y a Venus, este debe ser el aspecto que
impulsó y favoreció que Antonia pudiera salvaguardar para sí, al menos a uno de
los niños.
La Parte de Los hijos está situada a 8º de Capricornio, en conjunción casi
partil con el Nodo Sur. Parece que esto del Nodo Sur no es muy benéfico, Miguel
García me apuntó que es como un agujero negro que se lo traga todo. Pero además
Aben Ragen afirma: "Cuando la Parte de los Hijos esté en domicilio de
Saturno y la aspecten las infortunas (Marte le hace trígono), di que sus
hijos mayores morirán"
"Cuando la Parte de los hijos esté en una cuarta y su regente en otra
cuarta, es determinación de que el nativo tendrá hijos que se irán al
extranjero y se separarán unos de otros"
"Cuando la Parte de los hijos esté en la Casa X, sus hijos tendrán el
cuerpo lisiado" (Este aforismo no se cumple, al menos en el gemelo que
se quedó con la madre ni en los demás hijos que luego tuvo)
Actualmente le damos también importancia a Mercurio como cosignificador de
los hijos; es evidente su mal estado cósmico, en exilio, en conjunción a la
gran infortuna, en la Casa VIII y en cuadratura a Neptuno que se sitúa en la
Casa V.
La astrología tradicional considera como cosignificador de los hijos a
Júpiter (de cuyo estado ya hemos hablado) y añade: "Cuando uno de los
regentes de la triplicidad de Júpiter (Saturno-Mercurio-Júpiter) esté en
buen estado, pero los otros en mal estado, el nativo tendrá hijos, pero le
traerán pesares"
Segunda entrega: Las determinaciones natales de los
gemelos.
Escenario: la consulta de Adela. Llega Juan, el segundo de los hijos, con
una carpeta de la que saca varios documentos, entre ellos las partidas
literales de nacimiento de su madre, Antonia, de su hermano José Antonio y de
él mismo. Viene a preguntar por el paradero de su hermano y es él quien me
cuenta toda la historia. Su madre y su padre se casaron y tuvieron más hijos
(en la carta del nacimiento de los gemelos Júpiter está en la Casa III en
Escorpio (un signo fértil) en término de Mercurio, quien en su propia carta
(que no en la de José Antonio) también está en la Casa III).
El regente del Ascendente es, en ambos casos, Mercurio, el cual está
exiliado. Es curioso que en la carta de Juan se sitúe en la Casa III, y
podríamos leer directamente: tiene un hermano en el exilio. Mientras que en la
carta de José Antonio está en la Casa IV: ¿sus padres están en el exilio? o
¿sus padres le exilian?
Ambos hermanos tienen la cúspide de la Casa XII en Leo, sólo que en el caso
de José Antonio está en término de Saturno, mientras que en la de Juan, en
término de Mercurio. Ben Ragel dice: "Si el Sol es el regente de la
Casa XII, sus enemigos serán sus padres". Es de suponer que el
aforismo se ha desviado con más certeza hacia la carta de José Antonio porque,
al estar Saturno en IV, refuerza la terrible determinación; en el caso de Juan,
Mercurio, el regente del término está en la Casa de los hermanos.
Siguiendo con la Casa XII, en los dos casos está presente Plutón haciendo
un biquintil al Sol, que le recibe. Pero en el caso de José Antonio también
está presente Urano en la XII que le hace cuadratura al Sol, mientras que en la
carta de Juan el mal aspecto de Urano llega desde la Casa XI.
También tienen ambas criaturas la Parte de la madre en la Casa XII, sólo
que José Antonio vuelve a salir perjudicado, la tiene a 16º de Leo, en
conjunción partil con Urano y en término de Saturno, lo que nos lleva otra vez
hacia la Casa IV; mientras que Juan la tiene a 20º de Leo en término de
Mercurio, lo que nos lleva de nuevo hacia la Casa III.
Vamos a otro punto importantísimo para juzgar a la madre: la Luna; el
primer nacido, José Antonio la tiene situada en la Casa IV, mientras que Juan
la tiene en la III, que no olvidemos, es su Casa de gozo.
Con la Parte de Fortuna vuelve a suceder exactamente lo mismo, mientras que
José Antonio la tiene en érmino de Saturno, Juan la tiene en término de
Mercurio.
Con el infortunio sucede algo similar, José Antonio lo tiene en término de
Venus, que está quemada por el Sol, mientras que Juan la tiene en término de
Júpiter que está en Casa III.
Y como colofón: "Si en la Casa IV se encuentra Saturno en domicilio de
Júpiter, el nativo encontrará cosas enterradas como tesoros..... y se separará
de sus padres." Juan, el gemelo reconocido por sus padres fue quien
encontró los papeles de todo este misterio y sonsacó a su madre, mientras que
José Antonio fue separado desde el momento de nacer, de sus padres.
ADELA FERRER
DATOS:
La madre: 15/12/26 13:00 h. (no había diferencia horaria) en Ciudad Real
(38:59 N 3:55 W) Ascendente 7:33 Aries; M.C. 4:08 Capri; Luna 5:38 Tau.
Gemelo entregado en adopción: 13/11/58
2:00 h. (-1:00) en Valencia (39:29 N
0:22 W) Asendente: 10:59 Virgo; M.C. 8:02 Géminis; Luna 14:52 Sagi.
Gemelo reconocido: 13/11/58 2:30 h.
(-1:00) en Valencia. Ascendente: 16:59 Virgo; M.C. 15:04 Géminis; Luna 15:11
Sagi.